UNA INDUSTRIA INSOSTENIBLE
Un estudio reciente del Grupo Cleantech establece que el impacto ambiental, combinado de la industria editorial y la periodística de EE.UU. en el año 2008, equivalen a la tala de 125 millones de árboles, a lo que habría que sumar los vertidos de las papeleras a las aguas fluviales y el incremento en las emisiones a la atmósfera con efecto invernadero de este proceso productivo.
No cabe duda de que estamos en presencia de una industria insostenible en el tiempo.
Sin embargo, en el informe elaborado por Emma Ritch, se establece que todo el carbono emitido en el proceso de fabricación de un ereader de una marca muy conocida en EE.UU. es compensado sobradamente en el primer año de uso del mismo.
Según el mencionado informe, un año de uso de un lector electrónico, equivale a un ahorro neto de 168 Kg de CO2 al año (emisiones producidas en la fabricación y distribución de 22,5 libros)
Según las previsiones del Grupo Cleantech, los lectores comprados desde 2009 hasta 2012 podrían evitar la emisión a la atmósfera de 5,300 millones de kilogramos de dióxido de carbono.
No se conocen estudios similares en Europa, pero está claro que las cifras deben de estar en unas magnitudes muy parecidas.
Tampoco los fabricantes de automóviles han querido desarrollar una tecnología alternativa al ineficiente motor de combustión interna, en las últimas décadas, sin embargo, una vez demostrada la influencia en el cambio climático por la emisión contaminante de este tipo de vehículos, todas las grandes marcas están en una carrera vertiginosa tratando de posicionarse en primer lugar en el nuevo mercado de coches electrícos con emisiones 0 según se puede observar en la última feria celebrada en Frankfort