Este libro tiene de maravilloso la elasticidad mental que te provoca, juega estupendamente con los tamaños, y las imágenes, de tal manera que su riqueza imaginativa, va más allá de lo habitual.
No me dejó de llamar la atención, los juegos mentales por los que transitas leyendo el libro, era un niño cuando cayó en mis manos la primera vez, y la sensación que me transmitió, era la de un sueño muy vívido.
Opiniones
Este libro tiene de maravilloso la elasticidad mental que te provoca, juega estupendamente con los tamaños, y las imágenes, de tal manera que su riqueza imaginativa, va más allá de lo habitual.
No me dejó de llamar la atención, los juegos mentales por los que transitas leyendo el libro, era un niño cuando cayó en mis manos la primera vez, y la sensación que me transmitió, era la de un sueño muy vívido.
Ningún niño debería dejar de leerlo