Lo primero que voy a comentar es el título. Y es que me encanta. Sencillo, sincero y a la vez cautivador. Es un puñetazo que nos enseña que el amor duele.
“Almas rotas” son varias historias de amor, pero no de ese amor rosa fosforito. No. Nada más lejos. Aquí los personajes sufren y para que el lector no se crea otra cosa, Sandra Gabriel comienza la novela con un escena, perfectamente representación de las intenciones de la autora. Nada de medias tintas. Nada de tratar al lector con cojines. La verdad cruda, sin anestesia, pues en la vida real no existe la anestesia.
A lo largo de esta novela, que se lee rápidamente, asistimos a la evolución de los distintos personajes. Porque ese es otro punto a destacar. No son personajes estancados, los protagonistas de esta novela evolucionan, crecen a lo largo de la trama de una manera creíble.
Todo esto convierte a “Almas rotas” es una lectura recomendable.
Opiniones
Lo primero que voy a comentar es el título. Y es que me encanta. Sencillo, sincero y a la vez cautivador. Es un puñetazo que nos enseña que el amor duele.
“Almas rotas” son varias historias de amor, pero no de ese amor rosa fosforito. No. Nada más lejos. Aquí los personajes sufren y para que el lector no se crea otra cosa, Sandra Gabriel comienza la novela con un escena, perfectamente representación de las intenciones de la autora. Nada de medias tintas. Nada de tratar al lector con cojines. La verdad cruda, sin anestesia, pues en la vida real no existe la anestesia.
A lo largo de esta novela, que se lee rápidamente, asistimos a la evolución de los distintos personajes. Porque ese es otro punto a destacar. No son personajes estancados, los protagonistas de esta novela evolucionan, crecen a lo largo de la trama de una manera creíble.
Todo esto convierte a “Almas rotas” es una lectura recomendable.