Llegué a esta novela por inercia. Tengo debilidad por Alpha Decay y procuro estar al día de lo que publica… Y esta ha sido su ultimísima gran aportación a la labor de acoso y derribo a las dinámicas adiposas de literatura barata que saturan el mercado…
Sí, tiene título de libro de auto-ayuda, pero no lo es. O sí. De ahí parte el divertido juego de Sheila Heti a la hora de construir un personaje femenino enfrentado al solipsismo con viaje iniciático de regalo –a Nueva York- al más puro estilo Salinger.
El triángulo amoroso de la protagonista (con follamigo incluido) supone un recorrido endémico por las esencias “conceptuales” de la sociedad de nuestro tiempo. Se cuestionan –siempre desde el punto de vista de esta mezcla entre Britget Jones y Emma Goldman- todos los cimentos de la cultura contemporánea: arte, filosofía, literatura,… Pero todo “de bote”, porque la mente simplista de Sheila no da para mucho más y es precisamtne esa aparente ingenuidad la que acaba transformándose en una crítica tan feroz como hilarante al Sistema Decadente que la rodea. Ella discurre, y durante toda la novela se plantea cosas demasiado comunes en apariencia pero de un trasfondo abrumador. Un juego constante de guiños mortales a las perniciosas tradiciones que la protagonista descuartiza en su afán de superación. Familia y religión no salen especialmente bien paradas…
Mediante un registro “quasi-soliquio”, deíctico por naturaleza, mezcla el lenguaje oral con mails, transcripciones de grabaciones que ella misma realiza, reseñas de la obra de teatro que escribe, además de su original modo de recrear las conversaciones con los personajes contingentes que atraviesan la novela,… Todo este conglomerado consigue que el lector se sorprenda en cada capítulo. Su lenguaje fresco, impunemente escatológico, llena de humor este discurso múltiple que supera la “totalidad significante” por un tótum revolútum que atrapa al lector desde la primera página.
Decidir que abandonas la relación con el chico al que te follas mientras estás en posición fetal con la nariz metida en su raja del culo no tiene precio. Nuevos tiempos, nuevas escrituras. Creo que la señorita Heti se sentará en la primera fila junto a Dorothy Parker… Un libro brillante.
Opiniones
Llegué a esta novela por inercia. Tengo debilidad por Alpha Decay y procuro estar al día de lo que publica… Y esta ha sido su ultimísima gran aportación a la labor de acoso y derribo a las dinámicas adiposas de literatura barata que saturan el mercado…
Sí, tiene título de libro de auto-ayuda, pero no lo es. O sí. De ahí parte el divertido juego de Sheila Heti a la hora de construir un personaje femenino enfrentado al solipsismo con viaje iniciático de regalo –a Nueva York- al más puro estilo Salinger.
El triángulo amoroso de la protagonista (con follamigo incluido) supone un recorrido endémico por las esencias “conceptuales” de la sociedad de nuestro tiempo. Se cuestionan –siempre desde el punto de vista de esta mezcla entre Britget Jones y Emma Goldman- todos los cimentos de la cultura contemporánea: arte, filosofía, literatura,… Pero todo “de bote”, porque la mente simplista de Sheila no da para mucho más y es precisamtne esa aparente ingenuidad la que acaba transformándose en una crítica tan feroz como hilarante al Sistema Decadente que la rodea. Ella discurre, y durante toda la novela se plantea cosas demasiado comunes en apariencia pero de un trasfondo abrumador. Un juego constante de guiños mortales a las perniciosas tradiciones que la protagonista descuartiza en su afán de superación. Familia y religión no salen especialmente bien paradas…
Mediante un registro “quasi-soliquio”, deíctico por naturaleza, mezcla el lenguaje oral con mails, transcripciones de grabaciones que ella misma realiza, reseñas de la obra de teatro que escribe, además de su original modo de recrear las conversaciones con los personajes contingentes que atraviesan la novela,… Todo este conglomerado consigue que el lector se sorprenda en cada capítulo. Su lenguaje fresco, impunemente escatológico, llena de humor este discurso múltiple que supera la “totalidad significante” por un tótum revolútum que atrapa al lector desde la primera página.
Decidir que abandonas la relación con el chico al que te follas mientras estás en posición fetal con la nariz metida en su raja del culo no tiene precio. Nuevos tiempos, nuevas escrituras. Creo que la señorita Heti se sentará en la primera fila junto a Dorothy Parker… Un libro brillante.