Los ereaders se escapan por el momento del canón digital.
Según parece, estos dispositivos no existían para los legisladores que reformaron la Ley de Propiedad Intelectual aprobada en diciembre de 2007 ni cuando entró en vigor la Orden Ministerial de junio de 2008. Las negociaciones que llevaron adelante los representantes de la industria tecnológica y la cultural debatieron por fijar precios a dispositivos que ya existían en el mercado, sin dejar la puerta abierta a otros dispositivos como los lectores electrónicos que ya estaban desarrollados.
La industria tecnológica paga cantidades de entre 0,17 y 227 euros por el referido canon unitario por copia privada por los dispositivos sujetos a estas obligaciones. Es el caso de las memorias USB, grabadores de televisión con disco duro, equipos multifuncionales, escáneres, copiadoras o discos y grabadoras de DVD, entre otros.
La revisión de la orden de junio de 2008 está prevista para el verano de 2010, por lo que hasta entonces se mantendrá la actual situación. En esa fecha, también podrían incorporarse otros gadgets susceptibles de reproducir contenidos digitales como las videoconsolas portátiles o móviles. Estos últimos tributan con 1,10 euros por unidad en el caso de los terminales capaces de reproducir música digital.
Antonio María Ávila, director Ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores de España, aseguró ayer a ecodiario que la exclusión del pago de canon de los eBooks responde a la "deficiente redacción" de la orden que completaba la Ley de Propiedad Intelectual. "Técnicamente, la norma está bastante mal hecha; se pacata en muchos sentidos y, por todo ello, se encuentra actualmente recurrida por el Centro Español de Derechos Reprográficos (Cedro)", añade.
El representante del gremio de editores no considera el fenómeno del eBook como una amenaza para el sector, sino todo lo contrario. "Si está debidamente ordenado, el libro electrónico representa una magnífica oportunidad para poder llegar a más lectores y destinatarios", apunta Ávila. El único problema, añade, está relacionado con "la situación de indisciplina que existe en España con los derechos de autor y eso es muy grave porque España es el país con mayor piratería de Europa.
En la actualidad, los libros digitales apenas representan el 1,33 por ciento del total de las ventas del conjunto del sector en España, lo que representa un negocio de más de 42 millones en 2008.
Fuente:Ecodiario