Edward Snowdem propuesto para el premio Nobel de la paz.

El miércoles pasado el exanalista de la CIA, Edward Snowdem, ha sido nominado para el premio Nobel de la Paz 2014 por dos diputados de la Izquierda Socialista noruega.

Bård Vegar Solhjell y Snorre Valen los diputados socialistas han manifestado que con las filtraciones del ex agente de la NSA. El orden mundial es “más pacífico y estable” al destapar la trama masiva de espionaje de comunicaciones telefónicas y de internet, llevadas a cabo por Estados Unidos.

“Los actos de Snowdem han reinstaurado la confianza y la apertura como principios fundamentales en la política de seguridad", consta en el documento enviado al Comité Nobel noruego, institución que otorga el premio. Según los dos diputados, la dimensión del nivel de vigilancia y espionaje "nos ha paralizado" y ha creado un debate a nivel mundial.

Lo más irónico de todo esto, en el caso de que se lo concedieran, sería que tanto el Presidente Obama como Edward Snowden, gozarían del mismo galardón con la diferencia de que uno persigue al otro y quiere encarcelarlo de por vida. Curiosa situación.

En estos momentos habría que recordar independientemente de las opiniones políticas, el drama personal por el que atraviesan las personas que realizan estos actos. Lo más fácil es guardar silencio y hacerse cómplice de este gran complot que significa permitir que organismos del estado se salten la ley a la torera y se dediquen a controlar y espiar al pueblo, que teóricamente deben defender.

El soldado Manning no ha tenido tanta suerte como Snowdem, y Julián Assange —este último retenido en la embajada de Ecuador en Londres— ¿Por qué matar al mensajero? ¿Con eso se va a poder ocultar la verdad? Lo vemos bastante difícil, por el contrario es muy posible que estas personas se conviertan en ejemplos de un comportamiento moral que los estados hace mucho tiempo que perdieron, si es que alguna vez lo han tenido. 

Fuente: El Periódico internacional