¿Realmente se puede conceptuar como compra la adquisición de un libro electrónico con DRM?
A principios de este año Amazon implementó una característica en el Kindle que permitiría prestar a otra persona un libro por 14 días. Esta función que ya estaba operativa desde el año 2009 con Barnes & Noble en su Nook, en el caso de Amazon permitía prestar cada libro una vez, y sólo algunos libros.
Estas limitaciones, producirían que prácticamente no se usara la función del préstamo de libros, y aquí es donde surgió la brillante idea de Lendle.
En esta página después de registrarse, permitiría a los usuarios conectar sus Lendle, a una lista de libros que cada usuario tenía disponible, que Amazon confeccionó para los lectores asociados a través de Lendle.
Se podía elegir un libro, y el servicio enviaba una notificación al usuario poseedor, para que contestara en el caso de que pudiera prestarlo por 14 días.
Una idea genial, pero Amazon ha cerrado este servicio después de dos meses, comunicando a través de Twiter que lo había hecho por no"servir al objetivo principal de impulsar las ventas de productos y servicios en el sitio de Amazon."
Este es un episodio más de lo que significa la filosofía del DRM, resulta muy curioso que un libro impreso en papel, lo pueda prestar uno, cuantas veces quiera, y uno en formato electrónico no, si se pagan cantidades cercanas o iguales a una edición impresa en papel, ¿Por qué no puedo prestar mi libro cuantas veces quiera, y a quien yo quiera?. No estamos hablando de colgarlo en Internet, no estamos de divulgarlo públicamente, pero ¿Por qué no a un amigo a través del correo electrónico? ¿Qué diferencia hay entre que se lo envíe por correo, o se lo entregue en mano, o por correo ordinario en el caso de la edición en papel?
Se da la contradicción de que bajo esta perspectiva, en realidad uno no adquiere la propiedad, el dominio completo sobre el bien que ha comprado, en realidad es como si tuviera un usufructo sobre el mismo, pero limitado y además no puede transmitir la propiedad, porque sólo puede prestarlo durante 14 días y un número limitado de veces, no deja de ser un tema que desde un punto de vista jurídico, tiene su interés, pero desde luego no deberían de engañarnos, cuando alguien compra un ebook con DRM no lo está comprando realmente, solo adquiere un derecho de uso personal, pero no la propiedad del libro.