¿Está jugando Amazon con el "vaporware"?

Los que trabajamos habitualmente  en internet divulgando noticias, somos más que productores de información,  confeccionadores de resúmenes de prensa. En las grandes empresas, en los partidos y en otros ámbitos siempre hay alguien, que se lee a primera hora todos los artículos de los medios relacionados con la actividad de la compañía, asociación, partido, etc. y manda un resumen a todos los empleados, dirigentes o personas designadas para recibir esa información y así estar al día de lo que ocurre en el mundo, en relación a la organización a la que pertenecen.

 

Los blogueros y los que participan en páginas especializadas en internet, no somos una excepción. Así todos los días nos dedicamos a hacer resúmenes de prensa sobre un tema determinado. Rara vez generamos noticias propias, ya sean entrevistas, vídeos, crónicas de Ferias, eventos, etc. que es el verdadero trabajo periodístico  en la red. Esta tarea de resumen efectuada de forma rutinaria,  nos lleva muchas veces a eliminar el espíritu crítico, y publicar una síntesis de la noticia obtenida por internet, sin un mínimo análisis de lo que publicamos. Creo que es el caso de la última noticia que se ha difundido en cientos de páginas de internet   sobre los drones (aviones no tripulados) y el reparto de mercancías de Amazon.

 

El sábado pasado Jeff Bezos comunicaba que en cuatro cinco años, se pondría en marcha el reparto de productos de Amazon, a través de pequeños helicópteros que despegarían de los almacenes del vendedor gigante de internet, para aterrizar suavemente en el patio o la puerta trasera del cliente que ha comprado el producto no hace ni media hora. Hasta se ha colgado un video en internet que solamente en una semana, ha sido visto más de doce millones de veces en Youtube.

 

 

Si analizamos el video con un mínimo de rigor, nos encontramos que lo único que se ve, es un minihelicóptero saliendo de un almacen de Amazon cargando una pequeña caja conteniendo una tablet y ahí se pierde la imagen del dron; a continuación se pasa a otra secuencia en la que el pequeño helicóptero, se acerca a una casa de una zona residencial y deposita suavemente la caja delante de la puerta del satisfecho comprador.  Evidentemente esto se puede hacer perfectamente con aparato teledirigido de los que hay actualmente en el mercado, y con la vigilancia de un ser humano que controla la operación.  Otra cosa sería que el aparato realizara todas estas operaciones de forma automática, y sin el control de una persona. Además en los cortes de secuencia del video, se aprecia perfectamente que se han unido varias tomas, pareciendo una única.

 

Resulta que este proyecto es inviable, porque la legislación actual de EE.UU. no permite el uso de drones para fines comerciales, si bien en 2014 se va a dictar un nuevo reglamento. Por otra parte, la normativa sobre el espacio aéreo tampoco permite esto. Así que difícilmente veremos los miles de aparatos que comentan algunos surcando los cielos con productos de Amazon, por lo menos en los próximos años.

 

El proyecto tiene otros inconvenientes técnicos, como las posibilidades de pirateo de los aparatos para robar los productos que transportan, y evidentes dificultades para hacer entregas por ejemplo en ciudades con edificios altos, y cientos de obstáculos a distintas alturas.

 

Esto tiene la pinta de ser “vaporware”   en estado puro, pero desde luego Jeff Bezos ha conseguido su objetivo, millones de personas han visto el video y estamos hablando de su empresa a dos semanas de navidad.

 

Hasta ha aparecido una noticia en los medios diciendo que una compañía australiana formada por cuatro jóvenes,  se le ha adelantado al gigante americano y va a comenzar en marzo del año que viene, a repartir libros a sus clientes por medio de drones, aprovechando que en Australia el uso comercial de estos aviones no tripulados está regulado.

 

Siempre he pensado que internet es el futuro en cuanto a la distribución de bienes se refiere, y me ha parecido positivo también para la creación de puestos de trabajo. Cuando compramos una tostadora, o un libro, o unas botas en una tienda física tenemos que desplazarnos a ella. Cuando encargamos esos productos por internet, tiene que haber alguien que empaquete la mercancía, la recoja y la lleve al domicilio del comprador. Estamos eliminando puestos de trabajo en la tienda si se vende por internet, pero los estamos creando por otra vía, aumentando el sector servicios al incrementar el número de trabajadores que tienen que transportar el producto.

 

Si en algún momento se llegara a implantar el envío por drones a modo de minihelicópteros, más se me antoja una pesadilla que un avance. Ya estoy viendo estos aparatos circulando por los pasillos de los edificios, por las calles y hasta en el metro, buscando al comprador para entregarle su producto, acosándolo para que reciba su compra. No quiero pensar en las pobres palomas en las ciudades, que verán como su hábitat natural se ve invadido por enjambres de objetos voladores robotizados,  sin pagar impuestos, seguros sociales, sin tener horarios ni vacaciones funcionando a cualquier hora del día.

 

Si la producción y la distribución de bienes se robotiza hasta estos extremos, tendremos que plantearnos un cambio de paradigma, porque alguien tendrá que tener un salario para poder comprar los productos que fabrican las empresas. En todo caso, el Estado tendrá que empezar a cobrar impuestos o seguridad social a los robots como si fueran humanos, para poder seguir dando servicios públicos a la población.

 

En fin, para el año que viene veremos si es verdad que se empiezan a usar los drones en Australia, tampoco queda tanto.

 

Fuentes: El País  y The Wall Street Journal 

 

 

 

 

 

 


Consulta la comparativa de eReaders en Español, más completa de internet.

Podría interesarte...

 

 

 

 

 

Obra colectiva del equipo de coordinación ZonaeReader

También en redes sociales :)